Licencia federativa Vs Carnet ciclista ¿Cuál es la mejor opción?

Acaba el año y muchos ciclistas vuelven a replantearse una duda recurrente sobre la opción de federarse o no de cara a 2022. El carnet ciclista puede ser una alternativa, más económica, aunque no gozaremos de las mismas coberturas.
Licencia federativa Vs Carnet ciclista ¿Cuál es la mejor opción?
Facebook
Twitter
Whastapp
Autor Maillot Redacción
Autor de la fotoArchivo

Fecha de la noticia 30/12/2021


Llega diciembre y toca renovar licencia. O, en el caso de que no la tengamos, más de uno se planteará si merece la pena federarse o no de cara a la nueva temporada que está a punto de arrancar, sobre todo en el caso de los cicloturistas, ya que los ciclistas que compiten regularmente en Sub23, Élite o las diferentes categorías Máster, están federados a través de sus equipos o clubes.

Licencia federativa

Si eres un ciclista que habitualmente compite o participa en pruebas cicloturistas, la licencia federativa es un buen complemento para tu actividad deportiva. Contarás con seguro médico, además de con un seguro de responabilidad civil -cobertura máxima de 150.000 euros para daños personales y materiales que puedas ocasionar a terceros-, asesoría y defensa jurídica, entre otras promociones y descuentos.

La inscripción en competiciones o marchas, además, te saldrá algo más 'barata', ya que te ahorras la cuota del seguro de un día que exigen estos eventos -suele rondar los 10 euros-, y que tu ya tienes incluida con la licencia.

En el caso de Madrid, uno de los territorios con las tarifas más elevadas, el coste de la licencia 2022 para Sub23, Élite, Máster y Cicloturista alcanza los 140 euros anuales. Por lo que conviene hacer cuentas y contemplar dos cuestiones: en primer lugar, sopesar el número de pruebas o eventos en los que vas a participar, para ver si cubres la inversión del seguro de la licencia; y en segundo lugar, compararlo junto a la póliza de seguro del hogar o seguro de salud privado -en el caso de tenerlo- y que pueden incluir coberturas que desconocíamos como, por ejemplo, el robo de la bici.

Fuera del ámbito de las federaciones existe otra opción si lo que buscamos es estar cubiertos en nuestro día a día y, por ejemplo, no competimos o participamos en marchas cicloturistas, que es hacerse un seguro privado específico para ciclistas. En este caso, conviene leer bien la letra pequeña, pues muchos de ellos no cubren la participación en eventos o competiciones.

Federándonos, eso sí, contribuimos a sufragar los gastos destinados a fomentar el ciclismo de base o la formación de técnicos, indispensables para el futuro de este deporte. Una buena forma, sin duda, de aportar nuestro pequeño granito de arena al crecimiento del deporte que nos apasiona.

Carnet ciclista

La principal diferencia entre la licencia federativa de cicloturista y el carnet ciclista es que con la licencia se puede participar en las pruebas de cicloturismo y en aquellas que se convoquen con esta categoría, mientras que con el carnet ciclista no se puede participar en pruebas, salvo que te inscribas con licencia de un día. Obviamente, el carnet ciclista tampoco te habilita para participar en competiciones Sub23, Élite, Máster, etc.

Y es que, las coberturas en el caso del carnet ciclista son menores. Instaurado por la RFEC hace unos años, por 20 € de tarifa anual podrás rodar con tu bicicleta con la tranquilidad, eso sí, de saber que cuentas con un seguro de responsabilidad civil -cobertura máxima de 150.000 euros para daños personales y materiales que puedas ocasionar a terceros-, defensa jurídica y asesoría legal. El seguro médico, en este caso, queda excluido de la tarifa inicial.

Cabe la posibilidad de sumar coberturas adicionales, como por ejemplo un seguro médico de accidente deportivo -por 12 euros adicionales al año- que cubre los gastos derivados de accidente hasta 2.000 € -gastos que en el caso del seguro de licencia son ilimitados durante 18 meses- y seguro de fallecimiento de 6.000 € e invalidez de 12.000 €.

Cada federación territorial, además, puede añadir otras opciones adicionales a los servicios prestados por el carnet ciclista, que se antoja como una herramienta más eficaz, por tanto, para ciclistas más esporádicos o que no participen habitualmente en eventos o marchas.

Importante: hay que tener en cuenta que tanto la licencia como el carnet se rigen por el año natural, por lo que toca siempre renovarlo en enero si no queremos perder meses de cobertura y dinero.

¿Quieres estar al tanto de todas las novedades de Maillot Mag?
Suscribete a nuestro newsletter para no perderte el mejor contenido relevante, novedades, opinión, podcast, etc.