Test: Probamos las ruedas Shimano GRX Carbon (RX870) para gravel y 1,4 kg de peso
Precio:
1640€
| Distribuye:
Shimano
Víctor Marcos 
Mariano Herranz 
12/07/2023
La amplia familia de componentes GRX de Shimano enfocada al gravel también incluye dos tipos de ruedas específicamente diseñadas para esta disciplina. En el escalón más alto se encuentran estas RX870, elaboradas en carbono y con un peso declarado inferior a 1,5 kg el par.
Hace algo más de cuatro años, Shimano dio un golpe en la mesa de la industria ciclista poniendo en el mercado su primera línea de componentes dirigidos al gravel e introduciendo innovaciones que progresivamente se fueron trasladando a otros grupos, por ejemplo, a los Di2 de carretera Ultegra y Dura-Ace.
Por aquel entonces, Shimano ya contemplaba en su familia GRX unas ruedas específicas, las RX570 de aluminio, disponibles en medidas de 700c y 650b, y que todavía se mantienen en catálogo, pensando en el usuario que prioriza la resistencia, la durabilidad y el precio por encima de otras cuestiones como el peso.
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Tendríamos que esperar al año pasado, 2022, para contar ya con una rueda GRX en carbono, la RX870, enfocada claramente hacia un gravel más de rendimiento, con una cifra de peso declarado muy destacada (1.461 g el par) y un mayor compatibilidad con neumáticos más anchos (hasta 50 mm). Un paso adelante, sin duda, el de la marca japonesa, y que hemos podido probar durante unas cuantas salidas.
Hablamos de una llanta, como decíamos, de carbono en 32 mm de perfil, tanto delante como detrás, y un generoso ancho interno de 25 mm (por 21,6 mm del modelo RX570 de aluminio). Esto permite montar neumáticos desde 32 a 50 mm de ancho (siempre en medida 700c), por lo que el rango de uso se amplía enormemente, desde montar cubiertas prácticamente de carretera hasta las de gravel más 'agresivo'. El ancho externo, por cierto, es de 30,7 mm.
En nuestro caso, y haciendo uso de la Orbea Terra H30 de test que tenemos en nuestro haber estos días, montamos los Vittoria Terreno Dry de 38 mm con los que venía la bici de Mallabia, observando como estos 'ensanchaban' ligeramente sus dimensiones, quedando perfectamente talonados, cámara incluida. Porque las RX870, no lo hemos dicho -podría parecer una obviedad-, también son compatibles con sistema tubeless.
En la rueda delantera encontramos 24 radios entrelazados de diámetro variable (2,0-1,6-2,0 mm) y un robusto buje GRX de 100 mm de ancho, con rodamientos de bolas y agujas, y sistema de eje E-Thru, propio de la marca japonesa y que son sinónimo de garantía y durabilidad ¿Peso? 639 g declarados por Shimano, 640 g en nuestra báscula.
Respecto a la trasera, encontramos el mismo número y tipo de radios, montados sobre buje GRX de 142 mm, con sistema de eje E-Thru, compatible con cassettes de 11 y 12 velocidades. En este caso, estamos hablando, según Shimano, de 822 g de peso (sin cassette). Nuestra unidad de prueba, montada con un nada ligero cassette Deore 11-42 de 11 velocidades, marcó en la báscula 1.370 g.
En este sentido, entendemos que el usuario final de este tipo de ruedas acabará montando casettes más livianos, como el propio Deore XT o, si le va dar un uso más racing o 'carretero' a las ruedas, los de Ultegra o 105 de 11 velocidades, perfectamente compatibles. El sistema de frenos de disco, por cierto, es el Center Lock propio de Shimano.
Desarrollos aparte, volvamos a las ruedas, que es lo que nos ocupa. Estéticamente, el nivel de acabados y calidad es muy elevado. Sin ser una rueda espectacular o llamativa, es verdad que transmite ligereza y robustez a partes iguales. Y una vez montadas en una bicicleta ya de por sí atractiva, como esta Orbea Terra H30 (al menos, a nosotros nos lo parece...), hacen que la montura, sin duda, gane unos cuantos puntos.
Sobre la marcha, y más viniendo de unas ruedas de aluminio, la mejora es evidente: la ligereza se hace palpable desde la primera pedalada, sobre todo cuando nos ponemos de pie sobre la bicicleta y la hacemos 'bailar'. Y es que, ya lo hemos dicho en más de una ocasión, si buscáis 'adelgazar' vuestra bicicleta, las ruedas son un punto crucial para rebajar gramos... y que se note.
Pero ojo, esto no quiere decir que las RX870 no se muestren sólidas y resistentes donde lo necesitamos. Hemos rodado con ellas por todo tipo de terrenos, desde asfalto roto hasta senderos rocosos que rozan el XC, y la sensación que transmiten en todo momento es de seguridad y confianza. Algo 'provocado', en buena medida, por ese ancho interno de 25 mm que nos permite montar neumáticos más anchos con plenas garantías y la posibilidad de jugar con las presiones, sin comprometer la estabilidad lateral de las cubiertas. En este caso, el máximo estipulado por Shimano es de 5 bar/72 psi.
La calidad de los bujes GRX, además, queda patente sobre todo en los tramos de asfalto, donde transmiten un rodar fino y eficiente, al nivel de las mejores ruedas de carbono de carretera de Shimano. Nos faltaría realizar muchos más kilómetros con ellas para poder testar su durabilidad, pero con la experiencia -positiva- que ya tenemos con ruedas del fabricante japonés, en este sentido, creemos que estamos ante unas ruedas con una larga vida por delante.
En definitiva, las RX870 son una muy buena opción para todos aquellos que buscan aligerar su bicicleta de gravel, sin comprometer la resistencia y con la posibilidad de elegir neumáticos prácticamente de cualquier ancho de los que se utilizan habitualmente en esta modalidad. Su precio, además, teniendo en cuenta la calidad de fabricación y funcionamiento, es muy interesante: 809,99 euros la delantera y 829,99 euros la trasera.
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