Test: BMC Roadmachine 01
Hasta el infinito y más allá. La nueva BMC Roadmachine es una bici rápida, cómoda, muy elegante y súper eficaz en cualquier tipo de asfalto.
Iñaki Gavín 
David Agüero 
07/03/2017
Una bicicleta que todo lo hace bien, la nueva BMC Roadmachine es veloz en el llano, eficaz subiendo y estable y segura cuesta abajo. Una bici con la que pedalear hasta el infinito y más allá.
Polivalencia y rendimiento en todo tipo de asfaltos, estética muy elegante, personalidad y limpieza de líneas, comodidad y absorción en marcha, acabados, eficiencia en el pedaleo, bici para todo. Cuanto más la usas más te engancha.
Antes de pedirla tienes que tener claras tus medidas ya que, tanto cambiar de potencia como modificar la altura de esta, son más complicado de lo habitual.
En el catálogo del prestigioso fabricante suizo faltaba algo. Por un lado está la Teammachine, una bici consolidada dentro de la gama BMC, un modelo de peso, bien considerado dentro del "mundillo" ciclista con una reputación de "pepino race" ganado a pulso desde que apareció en el mercado. Por otro lado tenemos la Timemachine, una bici pensada para triatletas y para etapas contrarreloj que destaca por las enormes posibilidades y facilidad para adaptarse a la morfología del ciclista y por la gran integración de todos sus componentes.
Cerrando la gama de ciclismo de carretera está la BMC Granfondo, una bici súper cómoda, muy flexible y absorbente pensada para el cicloturista al que le gusta perderse durante horas por las carreteras y que vive alejado del concepto de rendimiento que tienen las BMC Teammachine y la Timemachine.
La nueva BMC Roadmachine ofrece alto rendimiento al ciclista de perfil exigente, se preserna rígida y flexible a la vez
Cuando la nueva BMC Roadmachine fue presentada, justo antes de verano del 2016, nos enteramos que los ingenieros y jefes de producto de la marca suiza llevaban ya varias temporadas trabajando para poner en "órbita" un modelo que fuera capaz de ofrecer al ciclista de perfil exigente pero a la vez polivalente una bici tecnológicamente avanzada, de alto rendimiento, rígida al pedalear pero lo suficientemente cómoda y absorbente como para hacer tiradas largas sin acabar completamente "descoyuntado".
Una bici rápida y estable bajando y buena escaladora al mismo tiempo…y todo esto sin olvidar aspectos tan importantes como la aerodinámica, la integración de todos sus componentes, la rigidez, la eficiencia en el pedaleo y una estética rompedora.
La nueva BMC Roadmachine aprovecha lo mejor de cada uno de los modelos que actualmente BMC tiene "en cartelera" para conseguir una bici rígida y eficiente al pedalear pero cómoda y absorbente sobre terreno irregular.
El triángulo trasero de la BMC Roadmachine está claramente inspirado en los finos tubos de la Granfondo. En el diseño de la parte trasera se ha recurrido al ACT (Angle Compliance Technology) que consigue flexiones puntuales de los tubos aportando comodidad y absorción, que junto con los neumáticos de 25 mm, consigue una bici con unos niveles de comodidad muy elevados (el cuadro admite cubiertas de hasta 30 mm de anchura).
En el diseño del triángulo principal BMC sigue confiando en las tecnologías TCC Tuned Compliance Concept que permite, trabajar conjuntamente en un cuadro de carbono la rigidez y la flexibilidad según nos interese.
El grueso tubo diagonal, la pipa de la dirección, las vainas y el puente de la horquilla están fabricados con una combinación de fibras de carbono de alto módulo pensado para mejorar la rigidez lateral, optimizar la transferencia de energía durante el pedaleo y aumentar la rigidez torsional. La suma de todos estos factores se traduce en una mayor precisión a la hora de trazar o de hacer cambios de dirección. Los tirantes (más finos y posicionados más bajo de lo habitual), las punteras, la horquilla y la tija del sillín están diseñados de tal manera que permiten una elevada flexión vertical del cuadro.
Con este sistema los golpes y vibraciones que provienen de la carretera nos llegan de manera mucho más débil o incluso son eliminadas del todo. Gracias a esta elasticidad la tracción de la rueda trasera de la nueva BMC Roadmachine siempre permanece constante sea cual sea el tipo de carretera por el que rodemos.
Por más que te esfuerces no serás capaz de ver ni un solo centímetro de cable desde el manillar hasta el eje trasero, realmente impresionante.
El concepto ICS Integrated Cockpit System, en el que BMC lleva varios años trabajando, es el culpable de que todo el cableado exterior se haya eliminado y vaya integrado y guiado por la potencia (que también es de diseño propio) hasta su lugar de destino (pinzas de freno trasero/delantero y cambio trasero/delantero) creando una estética limpia nunca vista hasta la fecha en este segmento de bicis.
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Los ingenieros de BMC tampoco han querido dejar a la vista el apriete de la tija, la maniobra de subir o bajar se realiza mediante un tornillo allen situado delante de la tija en el tubo horizontal del cuadro que se encuentra oculto con un tapón estanco. Este tornillo aprieta o afloja el sistema de anclaje integrado en el interior del cuadro que queda oculto: sencillo y estéticamente impecable. Los ejes pasantes (12x100 y 12x142) tampoco llevan el cierre a la vista ayudando a crear esa estética minimalista y limpia que tiene la BMC Roadmachine y que tanto me ha gustado.
En colaboración con DT Swiss, los modelos de BMC Roadmachine 01 y 02 vienen con una leva desmontable que hace las veces de herramienta para apretar o aflojar los ejes y que puede ir en el propio eje o llevarlo en el maillot o en la bolsa bajo el sillín.
Pongámonos cómodos, vamos a rodar con la nueva BMC Roadmachine
Llega el momento de empezar a rodar con la nueva BMC Roadmachine. Nada más sentarme lo primero que me llama la atención es lo diferente que resulta la posición de conducción con respecto a su hermana, la BMC Granfondo (GF02) y también con respecto a la gran mayoría de bicis endurance que hay en el mercado, sobre todo en la parte delantera de la bici. La explicación la encontrarás rápidamente si echas un vistazo a las medidas de la pipa de la dirección: en la Granfondo la pipa mide 143 mm y en la BMC Roadmachine 122 mm, más de 2 cms de diferencia entre una y otra (talla51).
De cara a ser una bici más atractiva para ciclistas a los que les gusta el concepto endurance pero que no se sienten atraídos por las posturas tan erguidas de este tipo de bicis estoy seguro que la postura de la nueva Roadmachine de BMC no les va a defraudar en absoluto.
De todas maneras, para dar satisfacción a todo el mundo los modelos Roadmachine 01 y 02 están provistas de la solución "Dual Stack" con doble altura con la que podrán elegir entre una postura más cómoda o una más agresiva con tan solo añadir o quitar espaciadores sobre la pipa.
