Test: Gafas KOO Spectro
Precio:
179€
| Distribuye:
Bikemotiv
J. Daniel Hernández 
Mariano Herranz 
29/04/2021
KOO es una marca de gafas, italiana para más señas, muy joven (nació en 2016) que, sin embargo, rápidamente se ha hecho un hueco en el pelotón internacional (las usan los y las corredoras de la estructura Trek Segafredo, por ejemplo, también tiene a Alberto Contador entre sus embajadores) y en el pelotón de los aficionados gracias a su diseño y calidad.
Porque si queremos hablar de diseño nos damos cuenta de que es algo innato a los 6 modelos para ciclismo que tiene su catálogo (también hacen, por ejemplo, máscaras de esquí o para MTB). Y si hablamos de calidad, sólo con mencionar que todas sus lentes son de Zeiss, cualquier duda se despeja.
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En esta ocasión probamos las KOO Spectro, unas gafas monolente de tamaño generoso (siguiendo la tendencia actual de gafas grandes que cubran mucha cara) que permite un amplio campo de visión y que cuenta con una ventilación muy cuidada para evitar el empañamiento.
Porque la unión y diseño de la lente y la montura permite cuatro grandes aperturas por las que circula el aire, sin llegar a molestarnos en ningún momento, evitando que por el sudor o humedad se nos empañen las gafas. Además, las lentes Zeiss cuentan con una tecnología antirreflejos para proteger mejor los ojos y mejorar la visibilidad. Mediante un filtro se eliminan los reflejos que provienen de la parte delantera y trasera de la superficie de las lentes, eliminando luz innecesaria, pero manteniendo la mayor cantidad de luz natural posible y mejorando el contraste y la definición de los objetos, lo que reduce la fatiga visual.
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Las KOO Spectro están disponibles en diferentes acabados de color de montura (2) y lente (5). La montura en blanco o negro es una mera cuestión estética, pero según la lente elegida tendremos una mayor o menor cantidad de luz transmitida. Siendo siempre de categoría 3, con la lente de color bronce tenemos un 12% de transmisión de luz, con la turquesa un 11%, con la roja y la verde un 23% y con la “Silver Mirror” un 11%.
En esta ocasión probamos la montura blanca con la lente Silver Mirror que, como su propio nombre indica, tiene un ligero efecto espejo y que está orientada a días muy soleados. No obstante, que nadie se asuste, pese a su categoría 3 y el 11% de VLT, si el día se nubla, o nos metemos en zonas sombrías, no nos quedaremos “a ciegas”, sino que todavía podremos volver a casa sin necesidad de quitarnos las gafas en los descensos. También conviene señalar que KOO cuenta con una lente extra en color rosa y de categoría 1 que permite un 58% de transmisión de luz, es decir, para días muy nublados.
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Respecto al ajuste, todo queda supeditado a dos factores que hacen muy bien su trabajo. Por un lado, los insertos de elastómero MEGOL al final de la patilla que sujeta la gafa con la cabeza y evita que se deslice, por mucho que sudemos, que esté lloviendo o cual sea la condición. Por otro lado, el puente de la nariz ajustable de goma blanda que, en lugar de contar con brazos flexibles cuenta con dos posiciones para las plaquetas, lo que nos garantiza que, una vez ajustadas, no se moverán con el paso de los kilómetros.
Puedo decir que cuando me llegaron las KOO Spectro me las tomé con cierto escepticismo pues las veía muy grandes para alguien que tiene la cara muy fina como es mi caso. Y consideraciones estéticas aparte (podéis ver cómo me quedan en algunos test que hemos publicado), he de decir que me han resultado muy cómodas. Y lo más importante, que una vez que me las pongo no se mueven de su sitio en todo el día, algo que es de agradecer. Y es que, pese a su diseño de apariencia muy generosa, la sensación es que se me ceñían perfectamente a la cara, sin dejar huecos muertos que hacen que cuando te ven desde fuera piensen que llevas unas gafas demasiado grandes. Se puede decir que son altas, pero no excesivamente anchas (144 mm en su parte más ancha).
Es cierto que las he preferido usar en días muy luminosos, porque en realidad me gustan las gafas más claras, pero como en esta época del año, y en zonas de montaña, no estás a salvo de que el cielo se nuble o entrar en zonas más sombrías, he podido darme cuenta de que son un buen aliado en casi todas las condiciones.
Precisamente por el diseño alto, pero estrecho, que antes mencionaba, en las zonas rápidas (llaneos y descensos) es una maravilla notar cómo te protegen enteramente los ojos del viento, por lo que nos ahorramos el molesto lagrimeo producido por el aire y que puede llegar a ser peligroso a altas velocidades. Las Spectro no molestan en absoluto, no se mueven y nos olvidamos de ellas para centrarnos en la carretera.
Una última consideración, para los amantes del peso, las KOO Spectro no van a batir récord de ligereza (36 g), pero la comodidad y protección que ofrecen hace que sean un modelo que merece la pena considerar.
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