Test: Sena X1: Casco con Bluetooth

El casco Sena X1, exteriormente, tiene la apariencia de un casco tradicional, solo sus tres botones en el lado izquierdo delatan que estamos ante un casco “conectado”. Se nota que el diseño ha sido parte importante del desarrollo y estéticamente es un casco agraciado. Está realizado policarbonato moldeado con revestimiento EPS, la correa es de piel, dispone de ajuste trasero regulable y el peso es de 400 gramos. Sí, es más pesado que un casco de ciclismo habitual, pero es el “peaje” de llevar un casco conectado.

El punto fuerte del X1 es que está equipado con un sistema de comunicación bluetooth 4.1 totalmente integrado, que te permite conectar con tu smartphone y hablar con hasta tres compañeros de ruta gracias al sistema de intercomunicador. A través de dos altavoces situados estratégicamente en los laterales del casco y un micrófono en la parte superior, podremos escuchar música, hacer llamadas y recibir datos de las aplicaciones de ciclismo como Strava, Endomondo... Todo ello de forma legal porque ya sabes que en ciclismo no está permitido el uso de auriculares.

Y como intercomunicador, podrás mantener conversaciones con hasta cuatro compañeros de ruta hasta un radio de 900 metros. Tanto para advertir peligros, avisar de percances o en caso de duda en la ruta… Suena genial, ¿verdad?

Dejémonos de teoría y pongámonos en marcha. Lo primero que notas es que al ponerte el casco necesitas un periodo de adaptación. La forma y el peso te hacen sentir algo extraño al inicio, pero con el paso de los kilómetros te acostumbras rápidamente.