Primeras Pedaladas: nueva Canyon Aeroad CFR 2021

Los años fueron pasando, consiguieron algo impensable, consolidar contra viento y marea un modelo de negocio on line de venta directa al consumidor final, para hoy por hoy no sólo haberlo naturalizado por completo ofreciendo todo tipo de facilidades en la adquisición de sus bicicletas o ser una de las marcas siempre protagonistas en las mejores pruebas del mundo en todas las especialidades, sino que el sueño de su fundador Roman Arnold, desde Koblenz (Alemania), creo que se ha visto superado con creces con innumerables hitos en el que hoy, con una bici como esta Canyon Aeroad CFR ha tocado el cielo.

No voy a negar que como experto, en cierta manera me molesta que de primeras en un dossier de prensa se plantifique de plano y como argumento de peso el resultado de una revista como Tour, que se han ganado un buen prestigio internacional dedicando muchos recursos al análisis técnico de todas las bicis que pasan por sus páginas. Y es algo por lo que les admiro muchísimo, pero lo digo no porque parezca que establecen dos clases de medios en los que están ellos y luego el resto, ni tampoco porque sienta una envidia insana al no disponer de esos recursos para ofreceros un dato que en términos de aerodinámica pone como ganadora a esta bici por encima de sus competidoras directas, sino porque más de una y de dos y de tres veces… he visto resultados que en cifras crudas no se corresponden con el resultado dinámico real de bicis que en un test de laboratorio son superiores.

En la carretera esos datos ganadores están del todo sesgados porque se convierten en un despropósito por su falta de coherencia en otros valores pasados por alto y no menos cruciales en una bici, como una geometría adecuada a esas prestaciones o una usabilidad real de un diseño que estuviera al nivel de esos datos. Las bicis hay que valorarlas en conjunto, en el entorno y a la intensidad para las que son diseñadas.

Aclarado esto y ciñéndonos a lo que nos hemos encontrado, para la nueva Canyon Aeroad CFR, la marca alemana ha puesto como objetivo que sea superior en todo, sin sacrificios ni excusas y ¿lo han logrado? Desde luego que sí. Es verdad que los números netos hablan por sí solos y lo más importante, que es lo que mi compromiso como experto os puede ofrecer, es que se han combinado para que funcionen todos juntos de forma extraordinaria en la carretera y a toda velocidad.

La nueva Canyon Aeroad CFR no es una bici de referencia mundial sólo porque sea muy aero (la historia reciente demuestra que la más aero no es la bici que más convence en términos prácticos) sino por el acertado criterio de bici de ruta total que han logrado.

Desconozco el presupuesto destinado al desarrollo de esta bici, pero dedicar casi 4 años de trabajo a una bici y contar con los servicios de Swiss Side durante cuatro meses a jornada completa, barato lo que es barato no ha debido ser. La empresa de diseños avanzados en CFD (Computational Fluid Dinamics) capitaneada por algunos de los mayores gurús de la Formula 1 y con una potencia de software brutal a su disposición, presentó hasta 22 diseños testados y validados en el túnel del viento, para que conjuntamente el equipo de desarrollo de Canyon buscara el equilibrio adecuado entre las teorías y la realidad. De hecho alguna de sus rondas de diseño suponían unas estructuras súper aero que rozaban lo grotesco, pero que por cuestiones de peso y efectividad dinámica se descartaron bajo el experto criterio del “Sí, es más aero, pero no es adecuado para una bici de alta competición”.

Así la nueva Canyon Aeroad CFR es bastante más aero que la anterior, no tanto como en teoría podría haber sido, pero nunca tan aprovechable como lo es en este equilibrio de mejora en ligereza y calidad de manejo que ahora veremos, con unos datos declarados de reducción de 7,4 vatios sólo para la nueva bici, de 4,4 vatios menos de resistencia con “Ferdi” (sique leyendo) y de 5,4 vatios menos juntando a “Ferdi” con los bidones y portabidones incluidos en la nueva Aeroad CFR.

No puedo imaginarme el descomunal trabajo que durante este tiempo ha debido suponer el trasiego de moldeado, de idas y venidas con test de validación en el preciso túnel del viento GST del lago Constanza, con la implementación y modificación a tiempo real de piezas impresas en 3D añadidas al modelo estructural de acero testado, para el que incluso diseñaron una piernas móviles de fibra de carbono a las que llamaron Ferdi, (lo he nombrado pero no había especificado qué era), para comprobar si el diseño final era el óptimo incluso con la interacción del pedaleo del propio ciclista.

El resultado final es el de una Aeroad CFR que mirada con atención es muy diferente a la anterior Aeroad, pero que en realidad sigue un esquema parecido. Ahora con todos los cables íntegramente ocultos por el interior de su estructura, vemos nuevos volúmenes más amplios en la sección lateral que han supuesto una nueva generación de sus tubos Kamtail Trident. Tenemos una geometría magistralmente retocada y más aprovechable, con un nivel de soluciones de locura en el que han conseguido el todo en uno; para que las mejoras aerodinámicas no sean sólo eso, sino la oportunidad de mejorar todo lo que compone a una bici.

Bien. Canyon con la Aeroad CFR no sólo ha dicho “lo vamos a mejorar en peso” sino que han doblado o triplicado la apuesta… y la han ganado. Así, el nuevo manillar integrado CP0018 no sólo es un 27% más ligero para sus actuales versiones Aeroad CFR y CF SLX respecto al anterior, sino que además es configurable en ancho y en altura, sin cortar ni comprar nada. Sí, sí… léelo todas las veces que quieras, pero es así.

El nuevo manillar incluido dispone por una parte de la potencia y la cruceta integrada en la misma pieza de carbono, y ya en la mitad de esta, por la parte inferior descubrirás dos tornillos T25 a cada lado.

Los extremos del manillar, que componen la zona de anclaje de las manetas y las curvas, entran lateralmente dentro de las partes centrales del manillar, pudiendo personalizar el ancho del manillar en tres puntos preconfigurados.

Con este nuevo ajuste, en las tallas 2XS (con potencia de 80mm), XS y S (ambas con potencia de 90mm), permite un rango de 37, 39 y 41cm. En M (con potencia de 100), L y XL (ambas con potencia de 110mm) de 39, 41 y 43cm. En 2XL (con potencia de 120mm) de 41, 43 y 45cm. Lo único que hay que variar en el ajuste es el encintado con un resultado de rigidez absoluto.

¿Increíble? Espera que hay más, porque luego la altura también se puede regular en 1,5 cm de 0,5 en 0.5 cm de rango, sin cortar el tubo y sin manipular nada que tenga que ver con el cableado interno.

Es tan sencillo como liberar el único tornillo que cierra la potencia contra el tubo de dirección, elegir las arandelas de más o de menos que necesitas, que se dividen en dos piezas y, elegir la altura y volver a cerrar el conjunto por presión usando de nuevo ese único tornillo a unos contundentes 9Nm.

Para esto se ha usado la idea original de aquellas potencias de 1 pulgada en la que la propia potencia entraba dentro del tubo de dirección, pero con la tecnología del carbono de hoy. Era una idea que estaba ahí pero que sólo Canyon ha sabido interpretar de una forma tan inteligente.

Así podemos ajustar el ancho y el alto del manillar de manera sencilla con un resultado impecable pero…¿Qué pasa con la longitud de la potencia?

La verdad es que el manillar es ni mismo está muy bien configurado, porque las longitudes están bien calculadas para cada talla y porque el reach y drop compactos permiten agarres muy próximos a la cruceta, a los mandos y a las curvas del manillar. Con esto, si un agarre te va bien, te van bien todos.

Sin embargo, si llegado el caso de que la potencia que viene de serie con la bici en tu talla ideal, resulta que te queda corta o larga, Canyon ofrece la posibilidad de sustituir el cockpit por el de longitud de potencia que más te convenga en las opciones de 80, 90, 100, 110 o 120 mm.

Puedes pensar en el matiz de que hay limitaciones en ancho por tallas, cierto es, pero es verdad que se han configurado para que cada bici tenga un rango de anchos acorde a la envergadura del ciclista objetivo y también que la medida “estándar” de 41cm de ancho está presente en todas las opciones.

De esta forma algo tan crítico como la configuración del manillar, desde Canyon lo dejan absolutamente resuelto de una forma magistral aunque sea integrado, por su calidad y por las posibilidades que ofrece, añadiendo que como son una marca que manda las bicis a casa, instalar el manillar es tan fácil como meter las curvas, poner los 4 tornillos en el ancho que más te guste…y a pedalear.

Tradicionalmente, las tijas suelen empezar a apretarse en el propio encuentro con el cuadro, es decir, disponiendo de un collarín o de un sistema de cuña que colapse la tija y que esta no se mueva desde ese punto más alto del cuadro.

El problema es que a nivel de comodidad es difícil obtener flexión de una tija de esta forma aero, ya que la porción de tija expuesta resultante es muy corta y si la sujetas por ese punto de entrada con el  cuadro, no es nada fácil que esta pueda ofrecer cierto rango de movimiento hacia atrás.

Los diseñadores de Canyon han dicho, perfecto, como en realidad sólo hay que neutralizar las fuerzas de presión, hagamos que el cierre vaya muy abajo, para que la tija y el cuadro de carbono, libres de esa presión concentrada por el sistema de cierre, puedan ofrecer esa flexión conjunta que se traduzca en la comodidad que nos exigen los ciclistas.

Así, la tija aero tiene un apéndice interno que se extiende más allá de la propia forma aero que acopla internamente con el tubo de sillín. También se consigue que un tornillo muy bajo, que va por la parte posterior del tubo del sillín hasta casi su parte media, sea el único punto de cierre de la tija para evitar que se baje, cosa que hace con una eficacia soberbia aplicando un par de apriete de 5Nm.

El resultado es que tienes una tija más aero cómo validan nuestros amigos de la revista Tour, más ligera como dice la báscula respecto al modelo anterior, y un resultado de más comodidad que os aseguro yo, que he tenido todas las versiones de Aeroad a medida que se han ido renovando y que en esta nueva de la Canyon Aeroad CFR es sin duda la que mejor resultado ofrece.

Si bien es cierto que no llega ni por asomo al pasmoso rendimiento de la tija de la versión Ultimate, que es la mejor tija confort de altas prestaciones del mercado sin mucha discusión, sí que es cierto que al quedar sujeta tan baja, deja que el tubo de sillín la acompañe mejor en impactos medios y altos para que el neumático de 28c trasero haga el filtrado de la pequeñas rugosidades.

El tren trasero del cuadro (vainas y tirantes) poco hace en este sentido, porque es una piedra y que es fácil de discernir de dónde viene lo uno y lo otro, básicamente porque mientras en los pedales, como lleves unas zapatillas de alto nivel como ha sido el caso con las fabulosas Shimano S-Phyre con las que he probado esta Canyon Aeroad CFR, cualquiera pueda percibir claramente que no hay una relación entre los trallazos que sientes en los pies al pedalear levantado sobre la bici y lo rebajado que te llega al culo cuando te sientas en el sillín sobre el mismo asfalto.    

Y la verdad es que no había mirado el cuadro de geometrías antes de salir a montar con la Aeroad CFR, pero en comparación, que todavía tengo una montada “hasta arriba”, noté un evidente incremento en la agilidad de respuesta, con una bici parecida en las maneras pero más sinuosa y reactiva que la anterior Aeroad.

No hablo sólo de la interacción del nuevo laminado de carbono, que habría que ser muy fino para entrar en apreciaciones en este sentido, hablo de que se nota que la trasera es más compacta y la delantera deja que el cuerpo llegue con más naturalidad para poder meter algo más de peso y control sin necesidad de tirarse en horizontal sobre el manillar. 

Ahora sé que las vainas son medio centímetro más cortas, a 41cm en todas las tallas,  y que el tubo horizontal es algo más corto y la pipa sensiblemente más alta, vamos, como en la Ultimate, que dicho sea de paso es una geometría que siempre me gustó por ser más sostenible y práctica durante más kilómetros y en todo rango de velocidades.

Parece que a los “pros” de turno también les pareció lo mismo, porque Canyon en base a sus peticiones han accedido a igualarlas con una geometría nueva que a la Aeroad le ha sentado de fábula.

¿Subiendo? Un avión. A mi también me costó interiorizar que una bici de estos volúmenes visuales pudiera ser escaladora. Es un trabajo que ya avanzaron en mi cabeza otros modelos de otras marcas, pero con 7 kilos, esta geometría, potenciómetro de serie para mantenerte en la línea del dolor límite sin pasarte de punto, y un manillar integrado que se deja agarrar así de bien en la cruceta, con los escaladores y la curva tan a mano…La Aeroad CFR sube como la que más, a ritmo o a palos, pero casi mejor para lo segundo.

Bajando, la Aeroad CFR ya era una de esas bicis que entraba en la categoría de “flechas” y la nueva lo es más aun, acentuado por una geometría en la que todo queda más al alcance y en la que se puede dosificar mejor el peso del cuerpo hacia adelante o hacia atrás, algo clave para hacer que el te siga entre la zona de pánico. 

Se nota que es más aero, sí que se nota, gracias en parte al formidable trabajo que DT Swiss ha desarrollado con las Dicut 1100, pero eso sí, que lo aero tiene “sus cosas”, y si en una curva una vez que vas plegado al máximo justo el vértice de la curva, el aire entra cruzado y fuerte por el interior, la primera vez crees que te va a levantar la bici del suelo. Luego ves que no pasa nada, que has trazado a toda velocidad y que ha sido sólo una rectificación sin más, pero de esa primera vez no te olvidarás nunca.

De esta manera lo que puedes esperar de la nueva Aeroad es una bici muy rápida gracias a todas las aportaciones aero con la estética racing propia de esta nueva generación de bicis más avanzadas, ligera, más ágil que la anterior versión en su manejo y más configurable en la posición incluso que bicis clásicas con componentes tradicionales. Es una bici de carreras en la que han mitigado la extrema incomodidad, pero tampoco esperes una bici de largos paseos apoltronado sobre la bici, en un concepto que representa un claro avance en esta categoría con planteamiento totalmente aprovechable para todos lo niveles de ciclistas amantes de la velocidad sobre una bicicleta.

Gama Canyon Aeroad:

En las plataformas Aeroad CFR y CF SLX Canyon ofrece siete tamaños de cuadro, desde 2XS hasta 2XL, para ciclistas que miden desde 158 cm hasta 200+ cm, todas con ruedas 700C. Sin embargo, en la nueva plataforma Aeroad CF SL, hay un modelo 3XS adicional para ciclistas de hasta 152 cm en los que especifican ruedas 650B Reynolds AR en tamaños 3XS y 2XS para l@s ciclistas más pequeños.

La nueva Aeroad está disponible a partir del mismo instante en el que publicamos este contenido, martes 6 de oc cubre de 2020 y exclusivamente a través de la web canyon.com. El modelo más asequible será la Aeroad CF SL 7 por 3.299 €, la Aeroad CF SLX 8 Di2 costará 4.999 € y la tope de gama Aeroad CFR 9 EPS tendrá un precio de 8.999 €.