Evita las multas. Cómo hay que llevar la bici en el coche correctamente

Portabicis de techo, de bola o de portón. Con la bicicleta desmontada, o a medio desmontar, en el maletero… Llevar la bicicleta en el coche es habitual entre los ciclistas, pero hay ciertas normas que debemos tener en cuenta si queremos evitar una multa.
Evita las multas. Cómo hay que llevar la bici en el coche correctamente
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Autor Maillot J. Daniel Hernández
Autor de la fotoArchivo, Thule

Fecha de la noticia 06/11/2017


Cada día, muchos ciclistas y bikers echan la bici al coche en busca de nuevas rutas, caminos y carreteras por las que disfrutar de este deporte. Sin embargo, aunque hay múltiples maneras de hacerlo, en muchas ocasiones desconocemos la reglamentación de la DGT y las normas que hemos de cumplir o los beneficios e inconvenientes de cada sistema.

Los sistemas más habituales para llevar nuestra bicicleta son: dentro del propio coche desmontada o a medio desmontar, con los portabicis de techo, los de la bola de remolque o los de portón. Cada una de estas formas tiene sus ventajas y sus inconvenientes, además de ciertas normas que han de cumplirse si no queremos recibir una multa… o algo mucho peor.

Evita las multas. Cómo hay que llevar la bici en el coche correctamente

Antes de meternos de lleno en cada manera particular de llevar la bicicleta en el coche, vamos a ver el consejo o recomendación más importante que debes seguir: piensa siempre en los máximos términos de seguridad y prevención. Si lo haces así, harás las cosas bien y evitarás las multas aunque no conozcas la norma “al dedillo”.

Llevar la bici dentro del coche, ventajas e inconvenientes

Es, quizá, el sistema más habitual, rápido y económico para hacerlo. Sus ventajas son claras: no requiere que compremos barras, ni portabicis, ni homologuemos una bola. Simplemente basta con abatir los asientos traseros y, depende el coche y cuánto queramos desmontar la bicicleta, a veces ni eso. Además, nos evitamos ruidos y no alteramos el coeficiente aerodinámico del vehículo, por lo que no aumenta el consumo. También es la forma más complicada de que nos roben nuestra bicicleta si tenemos que separarnos del coche. Sin embargo…

Si descuidamos ciertos aspectos no estamos exentos de acabar con una multa y un buen disgusto. La DGT recomienda el uso de los diferentes sistemas portabicicletas mejor que llevarla dentro del coche, ya que en caso de accidente ésta puede salir despedida golpeando a los ocupantes del vehículo y suponiendo un peligro mayor.

Evita las multas. Cómo hay que llevar la bici en el coche correctamente

Por eso, si la llevamos dentro del coche, debemos fijarla bien de forma que no se mueva. Lo mismo ocurre si tenemos que quitar la rueda o el sillín. Incluso con el equipaje si abatimos toda la parte trasera. La idea es que, en caso de accidente, nada pueda alcanzar los asientos delanteros, así que cada elemento que llevemos debe ir sujeto de alguna forma.

Tampoco puede entorpecer los movimientos y la visión del conductor, así que mucho ojo cuando el manillar alcanza los asientos delanteros y nos impide, por ejemplo, meter las marchas con total comodidad. En caso de que llevemos la bicicleta incorrectamente dentro del coche, la multa puede ser de más de 100 euros dependiendo de la valoración de la negligencia.

Un último inconveniente, apenas sin importancia después de lo que hemos visto, es que si practicamos Mountain Bike, o está lloviendo y no tenemos un sitio cerca de donde hemos dejado el coche para lavar la bicicleta, acabaremos manchando todo el interior del vehículo de barro, polvo, etc.

Portabicicletas de techo

Portabicicletas de techo ¿qué debemos saber de ellos?

El siguiente sistema más común es el de los portabicicletas de techo. Sus principales ventajas son que subimos y bajamos la bicicleta del techo montada y sin necesidad de tocarle ninguna pieza, lista para salir a rodar con ella. Es un sistema muy cómodo y una vez que cogemos la dinámica se hace muy rápido. Además, tendremos libre el acceso al maletero y al interior así como todo el espacio de carga del coche para el equipaje y otros compañeros de ruta.

Si llueve o volvemos llenos de barro, no mancharemos el interior con las ruedas. Y dependiendo de cómo pongamos los manillares y la disposición de los portabicis, en un coche de tamaño normal, podemos llevar hasta tres bicicletas en el techo. También es cierto que, una vez hecha la inversión de comprar las barras y el portabicis, éstos pueden valernos para casi cualquier coche simplemente cambiando sólo los pies de anclaje.

Pero este sistema tiene sus inconvenientes. El primero de ellos es que aumenta sensiblemente el ruido y el consumo de un coche (incluso se habla de un 20-25% más) por la variación de la aerodinámica del coche y el aumento del rozamiento. También aumentamos la altura total del vehículo entre un metro y metro y medio, así que nos podemos olvidar de subir las bicicletas dentro de un garaje, tendremos que hacerlo siempre en la calle. Ojo también en el paso de peajes y otras zonas con gálibo.

Portabicicletas de techo

Las bicicletas están más expuestas a miradas y manos indiscretas, aunque cualquier portabicis de una gama recomendable incluye algún tipo de candado o cierre de seguridad. También van más expuestas a las inclemencias meteorológicas durante el trayecto (lluvia, viento, sol, etc.).

Pero hay algunos aspectos más que tenemos que tener en cuenta si usamos este sistema. El primero de ellos es que no vale dejar las barras puestas y olvidarnos de ellas. Es recomendable revisar siempre, o al menos de una forma frecuente, todos los anclajes, tanto de las barras como del portabicis. Seguro que si llevamos un tiempo sin hacerlo nos llevaremos una sorpresa (desagradable) de cuánto se ha podido aflojar alguno de ellos.

También tenemos que pensar que, aunque parezca que la mayor tensión cuando viajamos con la bicicleta en el techo la recibe el portabicis, eso no es así. En realidad son las barras las que aguantan las tensiones provocadas por los movimientos que hace la bicicleta, así que es una mala idea comprar unas barras de peor calidad para llevar nuestra bici de miles de euros pensando que lo importante es el porta y que cualquier baca nos vale.

Portabicicletas de techo

La mayor parte de los accidentes en este sentidos los han provocado, o un error al fijar la bicicleta o el portabicis, o unas barras de baja calidad que han acabado rompiéndose o saltándose de sus fijaciones. Ojo también a las limitaciones de peso tanto de las barras como de los portabicicletas. A nadie le gustaría ir conduciendo por la autopista y ver, de repente, cómo su bicicleta sale despedida.

En ese sentido hay que prestar especial atención en el caso de las eléctricas. La mayor parte de los portabicis admiten un rango entre 15 y 20 kg de peso, y muchas eléctricas superan esa cifra, por lo que deberíamos tenerlo en cuenta. Lo mismo ocurre con bicicletas de DH (especialmente las más antiguas) y otros tipos.

Portabicicletas anclado al portón trasero

Portabicis de bola y de portón. Puntos fuertes y débiles

En este último apartado englobamos los sistemas que nos permiten llevar la bicicleta en la parte trasera del coche, son los portabicicletas de bola (que van anclados a la bola de remolque) o los de portón, que se fijan al portón trasero del coche y/o al maletero con un sistema de correas.

Es cierto que son los sistemas más caros, que el de bola nos obliga a instalar y homologar una de éstas y el precio sobrepasa los 300 €. Pero si transportamos bicicletas a menudo, las ventajas hacen que merezca la pena, ya que el aumento del consumo no es tan disparado como si las llevamos en el techo. También nos quitamos ruidos aerodinámicos, dejamos libre todo el interior del coche para llevar equipaje y además, al no estar tan expuestas al viento y la velocidad, ya que el propio coche les protege, las bicicletas van más seguras.

La mayor parte de los “portas” de bola o de portón de gama superior, nos permiten llevar hasta tres bicicletas simplemente moviendo el manillar y sin necesidad de desmontar las ruedas. La mayoría de los que van a la bola del remolque nos permiten también un acceso relativamente cómodo y completo al maletero sin necesidad de quitar las bicicletas. En el caso de los que van anclados al portón no todos lo permiten. Y en el caso de que así sea, hay que tener mucho cuidado al abrirlo, ya que lo hacemos con el peso extra del propio porta y las bicicletas, por lo que las bisagras a lo mejor no tienen la fuerza para sujetar todo y nunca debemos soltarlo.

Portabicicletas de bola de remolque

Aunque las ventajas son bastantes, estos sistemas no están exento de riesgos y obligaciones. El primero de ellos es que debemos cuidar mucho de que las bicicletas no sobresalgan de la planta lateral del vehículo y no impidan la visión por los retrovisores laterales. Tampoco deben tapar las luces y la matrícula del vehículo.

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En caso de hacerlo necesitaremos una placa y luces auxiliares. También nos obliga a llevar una placa V20 o dos formando una V invertida si las bicicletas sobresalen de la planta del vehículo. La placa V20 es un panel  que se debe colocar en la carga que transporte un vehículo cuando esta sobresalga hasta un 10% de la longitud total del vehículo o un 15% en caso de que la carga sea indivisible. Este último caso sería el que se aplicaría a los portabicis. Si nuestro portabicis supera más de ese 15% ni siquiera deberíamos montarlo.

Es muy importante saber cómo hay que colocar la placa V20: en caso de que nuestra bicicleta no sobresalga lateralmente de la planta del vehículo, sólo hay que llevar una en el centro. Si la bicicleta sobresale de la planta, son dos, una en cada extremo en forma de V invertida. Ojo, porque en realidad la bicicleta nunca puede sobresalir del ancho máximo marcado por los retrovisores ni puede taparlos, por lo que mucho cuidado si nuestra bicicleta es talla XL y en cualquier caso con la altura a la que la colocamos. En caso de que se tape la visibilidad de los retrovisores es mejor que el izquierdo, el más importante, quede libre. Las multas por no llevar la placa V20 comienzan en 80€, mientras que podemos comprar una placa homologada desde 25 euros.

Placa V20

Aunque las bicicletas van más protegidas del aire, al ir en la parte trasera del coche están más expuestas a los humos de nuestro tubo de escape, al barro y agua que puede saltar del coche en caso de lluvia (o polvo o cualquier suciedad que haya en la carretera) y también a recibir un alcance de otro vehículo en caso de colisión. Este es un factor importante que nos sirve para recordar que debemos señalizarlas bien. Como ventaja tenemos que podemos meternos en una zona de lavado y limpiar todo con la manguera (coche y bicicletas) sin necesidad de desmontar nada.

¿Y si me busco una furgoneta para llevar las bicicletas?

Como hemos visto, cada sistema tiene sus ventajas y sus inconvenientes. En todos y cada uno hemos de ser metódicos y precisos para evitar multas y disgustos, y como te decía al principio, siempre debemos pensar en factores de seguridad para ahorrárnoslos. Pero hay una cuestión que nos tenemos que plantear.

Evita las multas. Cómo hay que llevar la bici en el coche correctamente

Si hacemos muchos kilómetros de coche cargando con la bicicleta o bicicletas, si, de hecho, lo utilizamos la mayor parte de las veces para este tipo de desplazamientos ya que para el día a día vamos andando, en bici o tenemos vehículos más pequeños, igual optar por una furgoneta no es mala idea.

No tiene por qué ser una furgoneta de las más grandes, seguramente con las derivadas de los turismos tengamos suficiente. Simplemente una que nos permita llevar bicicletas en su interior sin desmontar nada, o desmontando sólo la rueda delantera, con anclajes para sujetarlas con cintas o eslingas (incluso con la caja separada de la cabina con una red o barras de protección).

Evita las multas. Cómo hay que llevar la bici en el coche correctamente

Si escogemos bien, apenas notaremos la diferencia de consumo que si llevamos las bicicletas en el techo, y tendremos un vehículo más polivalente por si lo necesitamos en el futuro

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