La e-bike: una alternativa real al coche en Europa según una encuesta

Esa voluntad de cambio e incremento de uso viene ligada a la solicitud de un aumento en la seguridad para los usuarios, por lo que se deduce de los datos de la encuesta, donde más del 70% de los encuestados declaró que les gustaría ver un mayor compromiso de los políticos para ampliar la infraestructura ciclista.

“Nuestro estudio muestra que el tema de la seguridad vial es una alta prioridad para los ciclistas y usuarios de e-bike y que las preocupaciones sobre los accidentes siguen siendo altas”, ha declarado Claus Fleischer, CEO de Bosch eBike Systems. “Necesitamos una cultura de ciclismo holística y positiva para aumentar la sensación personal de seguridad y animar a más personas a cambiar su método de transporte a e-bikes. En términos concretos, esto significa que la expansión de la infraestructura debe ser promovida con más fuerza e impulsada desde todos los niveles políticos”.

Profundizando en materia de infraestructuras seguras, el 78,7% de los encuestados declaró que era importante que se sintieran seguros mientras circulaban con sus bicicletas. De hecho, el 77,3% de los participantes en la encuesta están realmente preocupados por tener un accidente. Más de una cuarta parte de los encuestados (27,8%) ya habían sufrido un accidente, principalmente en vías urbanas (70,3%) y en la carretera (48,8%), mientras que algo menos de un tercio (28,4%) había sufrido un accidente en un carril bici.

Por todo ello, no es extraño que casi la mitad de la mitad de los encuestados eviten ciertas rutas (48,4%), altas velocidades (48,1%), ciertas condiciones meteorológicas (46,3%) u horas del día (32,8%).

El mero hecho de andar en bicicleta también influye a la hora de tener una mayor sensibilidad respecto a la seguridad relacionada con la movilidad general. En este sentido, ser adelantado por camiones (60,9%) o tener que compartir el carril con automóviles y vehículos pesados (59,5%) generan el mayor malestar entre los encuestados.

Es más, un estudio de la Federación Europea de Ciclistas (ECF) demuestra que una red bien desarrollada de carriles bici y ciclovías segregadas reduce significativamente los accidentes y genera una mayor sensación de seguridad entre los ciclistas. Esto se refleja también en la encuesta realizada por Bosch, donde en países con mejores infraestructuras la preocupación de los encuestados se reduce.

A pesar de que todavía nos queda mucho trabajo por hacer en España, ya podemos encontrar ejemplos de cómo fomentar este tipo de infraestructuras para ampliar el margen de protección de los ciclistas y animar al uso de la bicicleta en el día a día. Uno de esos ejemplos es Valencia, cuyos 200 km de carriles bici han mejorado de forma notable la seguridad para los ciclistas urbanos, logrando que el 4,8% de los desplazamientos diarios ya se realicen en bicicleta. Una cifra aún baja, pero que hace solo un par de años era irrelevante. De hecho, esa red ciclista fue uno de los factores por los que Valencia ha obtenido el título de Capital Verde Europea 2024.

El informe de Bosch también confirma que el sentido de la responsabilidad de todos los usuarios de la vía es fundamental. Y en este sentido, la responsabilidad de los usuarios de e-bike recae en el hecho de pedalear de forma segura y respetando las normas, y manteniendo sus bicicletas en buen estado mediante revisiones periódicas y ejecutadas por profesionales, además del uso del casco.

Junto al desarrollo tecnológico y la fabricación de productos para mejorar la seguridad, como el sistema ABS, Bosch eBike Systems sigue apostando por la seguridad de los ciclistas en otros ámbitos, como la campaña “Más seguridad eBike para una movilidad sin preocupaciones”, realizada en colaboración con JobRad GmbH y que ha puesto el foco en una amplia variedad de temas, como el mantenimiento correcto de las e-bikes o el transporte seguro de los niños.