Alcohol y montar en bicicleta: esto es lo que dice la ley

Como en cualquier otro medio de transporte, en bicicleta también está prohibido montar en ella alcoholizado. Te contamos los límites y algunas sanciones que esto conlleva.
Alcohol y montar en bicicleta
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Autor Maillot Iván Tomas Bayón
Autor de la fotoArchivo

Fecha de la noticia 29/07/2019


Muchas personas creen que la bici, al ser un vehículo que no necesita carnet y es fácil de conducir, se puede conducir ebrio. Pero, no piensan el verdadero peligro que esto conlleva. La bicicleta es un vehículo muy vulnerable en comparación con un camión, un autobús o un simple coche. A esto añadele los bandazos que irás dando al conducir la bicicleta borracho y la falta de reflejos.

Según el reglamento de circulación, los ciclistas no podrán manejar la bicicleta en vías públicas con tasas de alcoholemia superiores a 0,5 gramos por litro en sangre y 0,25 miligramos en aire expirado, siendo esta tasa su tasa de alcoholemia máxima. Con una tasa de 0,15 mg/litro o inferior no serán sancionados. Además estaremos obligados a  someternos a las pruebas de alcoholemia para que puedan establecer la detección de las posibles intoxicaciones por alcohol. También es probable que nos tengamos que volver a casa andando o en taxi ya que nuestra bicicleta puede quedar inmovilizada.

Las sanciones son iguales que las que se ponen al conducir otros vehículos que no necesitan licencia para su conducción, como los patinetes eléctricos. En este caso, no se quitarán puntos del carnet, ya que el vehículo no requiere un conductor con éste. Pueden llegar a ser hasta 1000 euros de multa si superas los límites establecidos por la ley. También puede darse el caso de que el juez determine el tiempo que no podrá utilizar cierto vehículo el conductor implicado. Lo normal es que sean entre 6 y 12 meses de sanción, pero se han dado casos de hasta 4 años.

A parte del valor económico, también es un peligro para el conductor de la bicicleta o los conductores y peatones que circulan por la vía pública. Se pueden causar graves accidentes y daños humanos o materiales.

En estos casos, lo mejor es no utilizar ningún vehículo y usar el transporte público. Y si haces ciclismo de carretera o montaña y has quedado al día siguiente con la grupeta: ¡olvídate! Por culpa del alcohol no descansarás ni recuperarás y al día siguiente estarás para el arrastre.

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